EL CARPIO
Aunque la actual Villa de El Carpio se fundó en el siglo XIV, sus tierras estuvieron pobladas en época íbera, posteriormente se ubicaría en ellas durante la época musulmana la población de Alcocer. Pertenecía está a la Cora de Córdoba, siendo citada como uno de los distritos del Reino Cordobés. En el siglo XII fue conquistado por Fernando III (1240), siendo posteriormente donada su villa y fortaleza al Concejo de Córdoba y delimitado los términos de su feligresía.
Parte de su término fue repartido entre varios miembros de la familia que colaboró en su Reconquista: los Meléndez o Méndez de Sotomayor. Uno de los descendientes de esta familia, Garci Méndez de Sotomayor, Logra reunir en su poder en el siglo XIV los donadíos repartidos por Fernando III, mandando construir en ella una torre fortaleza alrededor de la cual surgió la población de El Carpio, dándose como fecha de su fundación el año que se terminó la construcción de aquella.
En 1325, el topónimo (cerro) parece confirmar el emplazamiento del pueblo. La villa a lo largo de la Edad Moderna se erige en el centro de uno de los señoríos más importantes en tierras cordobesas. En 1945 alcanza la categoría de Marquesado y a partir de 1559 extiende su jurisdicción a los pueblos vecinos. El fenómeno constituye un fiel reflejo del poderío de la Casa de Haro, uno de cuyos miembros llega a ser válido de Felipe IV. A final del XVII dicha casa se unió con la de Alba que actualmente conserva importantes posesiones.
Uno de sus principales monumentos son las denominadas Grúas.
Se encuentran situadas a orillas del Guadalquivir, próximas a los restos del llamado Castillo de Alcocer, a espaldas de la ermita de San Pedro. Se tienen noticias de que, anteriormente, en 1537, don Luis Méndez de Haro, preocupado por abastecer a sus tierras de agua suficiente, sacó un cauce del río Guadalquivir, con lo que existía un precedente en las obras de ingeniería que iba a realizar su sucesor. Las obras se realizaron entre el 1561-1568.